¿Dónde estuve este verano?

Bueno, aparte de en una playa de Cádiz.

No lo he dicho todavía y ya va siendo hora. Este verano, como se dice por algunos, he cruzado el charco. Si, crucé el Atlántico en unos fantásticos aviones via Madrid-París fui a pasar unos dias a los EEUU. Sí, estuve en NYC y visité Baltimore y Washington. Pues genial todo, os lo recomiendo sinceramente. Los vuelos, la gente con la que iba, la gente que allí vimos todo fantástico. NYC me gustó mucho, cada día que pasaba me ganaba más, tengo que reconocerlo. Tuvimos un clima no muy caluroso contra lo que suele ser habitual allí por estas fechas y me gustó mucho. La gente por la calle muy amable y abierta, cada uno a lo suyo y sin molestarse. El Central Park es un parque precioso, lleno de vitalidad, gente paseando, en bici o corriendo por circuitos interiores, jungando al beisbol o sentados solos, o en compañía, sobre el césped. Las avenidas de Manhatan con esas moles tan gigantescas que sin embargo no me agobiaron. La variedad tan grande que hay entre sus distintos barrios, pasar de Chinatown a Little Italy es como pasar de China a Italia con sólo cruzar una calle, o de esta a una ciudad centro europea en el Soho. Manhatan es supermoderna. Estuve en una función de un musical en un teatro de Brodway, la supermega moderna zona de Time Square es impresionante. El metro funciona estupendamente y te lleva y te trae a casi cualquier sitio, aunque tiene unas estructuras muy antiguas. Los restaurantes de comida italiana, griega, china, etc. Las casas de comida rápida –los Dely y otras marcas- en las que curiosamente te preguntan stay or to go en vez de to take away. Los tamaños tan descomunales de las cosas más usuales, p.e., los vasos cafés de más de medio litro el pequeño. La dificultad de encontrar cervezas – que está prohibido beber en la calle y que son bien caras-. Los camiones americanos tan bonitos con esos impresionantes morros . Los museos tan increibles, tan bien organizados y con tanta cantidad de obras de arte o de piezas. En el de Ciencias Naturales ví los esqueletos de los dinosaurios y mamíferos extinguidos. También subimos al Empire State Building, fuimos a la Estación Central que sale en tantas películas- recordais la escena del carrito de niño descendiendo por las escaleras peldaño a peldaño. Genial. Tampoco hubo problemas al entrar, eso sí llevabamos el nuevo pasaporte electrónico y los impresos de inmigración bien rellenos. Bueno que lo pasé muy bien y me encantó aquello.
Por cierto, junto a Washington hay una ciudad que se llama Georgetown de casitas de dos y tres plantas casi irlandesas que es una preciosidad, digna de visitarla.

Saluditos