Me encuentro numerosas veces en periódicos, radios, blogs y televisión referencias a algunos de los libros de la trilogía Millennium de Stieg Larsson. Con esos nombres tan largos y extraños como:
- Los hombres que no amaban a las mujeres.
- La chica con una cerilla y un bidón de gasolina.
- La Reina en el palacio de las corrientes de aire.
Nombres desde luego muy apropiados para esta época en la que mucha gente se ha vuelto adicta a lo vacío, impreciso y nada claro ni adecuado. Estas tres novelas me parecen una vuelta a la novela de folletines, antes por fascículos y ahora por volúmenes, en los que el autor, fallecido desgraciadamente antes de haber podido disfrutar de sus grandes éxitos de ventas, recurrió a la táctica del "continuará", manteniendo los personajes y la facilidad de lectura, con un desarrollo lleno de sucesos sorprendentes y efectistas. Uniéndole el recurso de usar elementos misteriosos de forma bastante continua.
Sin duda, a su gran éxito habrá contribuido su cómoda y fácil lectura, la muestra de una sociedad con personajes bastante singulares, así como por haberse convertido en unos libros de moda de estos años. Ya sabemos a la gente le da por algo y acaban todos imitándose. Nadie se quiere quedar fuera del mundo.
- Los hombres que no amaban a las mujeres.
- La chica con una cerilla y un bidón de gasolina.
- La Reina en el palacio de las corrientes de aire.
Nombres desde luego muy apropiados para esta época en la que mucha gente se ha vuelto adicta a lo vacío, impreciso y nada claro ni adecuado. Estas tres novelas me parecen una vuelta a la novela de folletines, antes por fascículos y ahora por volúmenes, en los que el autor, fallecido desgraciadamente antes de haber podido disfrutar de sus grandes éxitos de ventas, recurrió a la táctica del "continuará", manteniendo los personajes y la facilidad de lectura, con un desarrollo lleno de sucesos sorprendentes y efectistas. Uniéndole el recurso de usar elementos misteriosos de forma bastante continua.
Sin duda, a su gran éxito habrá contribuido su cómoda y fácil lectura, la muestra de una sociedad con personajes bastante singulares, así como por haberse convertido en unos libros de moda de estos años. Ya sabemos a la gente le da por algo y acaban todos imitándose. Nadie se quiere quedar fuera del mundo.
2 comentarios:
te los has leído?
carmencitta: Me dejaron los dos primeros para leerlos. Para el tercero espero a las vacaciones.
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